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El Terrorismo de Estado en Honduras intentó asesinar a un sacerdote del Pueblo
Honduras
abrazó al Padre Marco Aurelio Lorenzo, párroco de Macuelizo, Santa Bárbara,
Honduras, víctima de tortura y un cruel intento de asesinato el 26 de diciembre
de 2011.
Por Dick y Mirian Emanuelsson
VIDEO (72 minutos):
http://vimeo.com/34954943
MUNICIPIO de MACUELIZO / 2012-01-05 / El
día 26 de diciembre el Sacerdote diocesano Marco Aurelio Lorenzo, párroco de la
iglesia Católica del municipio Macuelizo, departamento de Santa Bárbara, estuvo
a punto de perder la vida junto con sus dos hermanos. Ocho policías intentaron
asesinarlos empujando la camioneta en la que viajaban, hacia un barranco de 300 metros de abismo,
con los tres hermanos esposados adentro del vehículo. El carro quedó atrapado
en una cuneta.
El hecho es uno
más de los innumerables abusos, atracos, torturas y asesinatos que el pueblo
hondureño ha sufrido por un cuerpo policial que se ha destacado, desde el golpe
de estado, de violar los derechos humanos de la forma más flagrante y hacer
todo menos “Proteger y Servir” como dice su consigna.
Cuando llegamos
al pequeño municipio de Macuelizo cerca la frontera con Guatemala, en la
iglesia no entraba un alma más. Todo el pueblo había llegado para expresar su
solidaridad al padre Marco, hombre por demás querido y respetado, de estatura
baja y cuerpo fuerte. Mujeres y hombres campesinos, con sus rostros manchados
por el sol y las manos curtidas por la dureza de su trabajo, levantaron el puño
gritando ¡“El Pueblo Unido Jamás será Vencido”. Además cantaban la canción del
popular grupo venezolano, Guaraguao; ¡“No basta rezar”!
Representantes de
la Resistencia
hondureña, tanto de ese departamento como de los departamentos vecinos, Copán,
Puerto Cortes y Yoro, estaban presentes, igual que los dirigentes y militantes
de los movimientos sociales y de DD.HH. “Honduras te abraza, padre Marco
Aurelio”, decía la gente. Ante las expresiones de apoyo fue abrazando uno a
uno, con lágrimas en los ojos que no perdieron ni por un minuto la firmeza y la
decisión de no dejarse intimidar por el terrorismo de estado que cada día cobra
más víctimas en esta nación centroamericana.
La población del municipio de Macuelizo llenó la iglesia para expresar su solidaridad y respaldo al Padre Marco Aurelio Lorenzo. FOTO: DICK EMANUELSSON. |
EL PADRE HABÍA REALIZADO varias misas,
bautismos y bodas desde el día 19 de diciembre y en forma continua, por lo que
se encontraba agotado cuando hicieron una pausa en la trayectoria esa noche del
26 de diciembre a las 20.15 horas. Día que este pueblo no olvidará jamás por el
espanto que vivieron esos hombres.
Uno de sus
hermanos se bajó del vehículo para reforzar la llanta con una piedra y evitar
que se deslizara. En esta actividad se encontraba cuando se presentó una
patrulla policial con ocho agentes a bordo, que sin mediar palabra o requerir
sus documentos empezó a golpearlo.
16 puntos es el resultado de la tortura policial. Foto: Dick E. |
El prelado bajó
del carro solo, para ser inmediata y sorpresivamente esposado y golpeado
brutalmente. Lo lanzaron al suelo y un agente se paró sobre su cuerpo mientras
otro le daba patadas calzado con sus botas de reglamento. Luego despojaron al
padre y a sus acompañantes de sus pertenencias personales, alimentos que
llevaban para compartir con la familia y dinero, lo obligaron a subir al
vehículo al que le quitaron la piedra, empujándolo a una hondonada. El vehículo
se detuvo en una cuneta.
Cuenta el Padre
Marco Aurelio que los policías posteriormente sacaron el automóvil y esposaron
a las víctimas a los barrotes de la patrulla, como si fueran delincuentes. Por
los golpes el religioso perdió el conocimiento y requirió de una sutura de 16
puntos en su cabeza.
ASÍ LO VIMOS EN LA IGLESIA sentado con su
madre y otros compañeros sacerdotes del occidente hondureño, reconocidos por su
incansable lucha contra la usurpación de los recursos naturales de las mineras
y de las madereras, luchas que han cobrado otros dos atentados contra el padre
Marco Aurelio, en 2004 y 2007.
– Sabemos
concretamente que la minería es un poder en el país. Las leyes son manipuladas
según la conveniencia de los intereses nacionales e internacionales. Y de ahí
se afecta y se justifica toda lucha y actuación contra mi persona.
– En esta tercera
acción (el 26 de diciembre) había ya una premeditación. Porque he estado al
lado del pueblo, con el pueblo, por la lucha de la justicia. Hemos encontrado
con instituciones en las cuales prevalece más el planteamiento del Poder que la
justicia. Y desde ahí se tergiversa la misma ley y todo juicio que se da.
Preguntamos al
padre si la orden de matarlo venia desde arriba, porque asesinar por asesinar
no debería hacerse, ni siquiera en Honduras.
– Realmente tiene
que haber una orden. . . eso me deja un poco cuestionado, porque ellos cuando
me detienen, me torturan, ellos dicen que hasta después. . . incluso a uno de
mis hermanos le dicen que “entierre la cabeza, que se le entierre en la llanta
del repuesto para que no mire lo que estamos haciendo”, dicen ellos. Cuando
llegamos al hospital, alguien dice; “él es sacerdote”. Y ahí comienzan a
preguntar, no sé si es un juego por parte de ellos, en ese sentido. Me deja de
ese sentido como confusión y preocupación ¿quién esta detrás como autor
intelectual? Porque los autores materiales son ellos (los policías) pero el
autor intelectual no logró captar donde puede estar.
TOMA LA PALABRA O MEJOR DICHO,
el tono, el cantautor Elías Vélez, que en homenaje al Padre Marco Aurelio ha
compuesto una canción que relata lo sucedido ese 26 de diciembre fatal. Y como
un sencillo campesino, sus palabras no son de doble sentido o subliminales sino
que van en directo a los autores del intento de asesinar a los tres hermanos
Lorenzo. Canta y dice que los “policías traidores” no pudieron asesinar al
Padre Lorenzo en el simulacro de accidente “porque Dios estaba con él”. Elías
exige que el atentado se aclarezca ¡“y que vaya al infierno ya la Policía Preventiva ,
que no son más que ladrones y asesinos de la vida”!
Juan Almendares, CPTRT. Foto: Dick E. |
DIFERENTES PERSONALIDADES DE los
organismos de derechos humanos hondureños hicieron uso de la palabra, entre
ellos Juan Almendares Bonilla, conocedor de las maniobras de las minerías
transnacionales y director del CPTRT, Centro de Prevención, Tratamiento y
Rehabilitación de las Víctimas de Tortura, para expresar su solidaridad y respaldo
al sacerdote popular.
– No se trata de
un “accidente” o de algo circunstancial. Lo que debemos entender los hondureños
es que existe un aparato de una oligarquía dominante, poderosa, articulada con
el capitalismo internacional y las grandes multinacionales y sobre todo la
política militarista del Pentágono de Estados Unidos. Se trata pues, de una
lucha muy dura en donde los sacerdotes y monjas del occidente son necesarios en
la defensa de la Madre
Tierra.
La coordinadora
del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH),
Bertha Oliva, declara al sacerdote Marco Aurelio Lorenzo como “Defensor
Universal de los Derechos Humanos”.
– Tenemos un
defensor planetario de la vida y de la libertad y orgullosamente lenca,
indígena, agregó Oliva que convocó a los asistentes para comprometerse a
desmantelar el cuerpo más nefasto de la historia de Honduras como es el
Ministerio de Seguridad.
– Hablar de
depuración es hacerle el juego al golpismo, es hacerle juego a quien tiene una
política criminal de Estado contra de los defensores de la vida y en contra de
los defensores de los ciudadanos y de las ciudadanas”, subrayó la veterana en
la lucha por los derechos humanos, condecorada el año pasado por el gobierno
holandés con el Premio Tulipán.
Bertha Oliva, Cofadeh, con el padre Marco Aurelio. Foto: Dick E. |
OTRO SACERDOTE, EL PADRE NERY,
Coordinador del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP) en el
Departamento de Santa Bárbara , resumió los sentimientos de los presentes:
– El pastor que
no se encierra entre cuatro paredes, el pastor que mira a Dios en los árboles,
el pastor que mira Dios en el agua, en las flores y por supuesto en sus
hermanos y hermanas, ese pastor es realmente un pastor defensor de la vida. Ese
pastor es Marco Aurelio.
Oscar, otro
dirigente popular de la resistencia departamental advirtió al régimen de
Porfirio Lobo y sus funcionarios que todo será peor si no toman medidas
drásticas con el cuerpo policial, al que caracterizó como “una podredumbre”:
– Deben retirarse
inmediatamente, pero si política del estado no toma posiciones con esa
organización criminal (cuerpo policial), el pueblo hondureño tendrá que tomar
decisiones y ¡no va a diferenciar cuales son los buenos y los malos policías en
ese momento!
– Es probable,
que el pueblo hondureño esté llegando al limite de su tolerancia. Hemos sido
pasivos. Pero va a llegar un momento en que esa tolerancia llegue a su límite.
Y por lo tanto, los atropellos a las personas que representan a Cristo acá en
la tierra, es el atropello más grande puede hacerse a un pueblo que ha sido
evangelizado por ellos.