Unas reflexiones sobre el trabajo de los periodistas y medios al servicio del estado colombiano
Por Dick Emanuelsson
En los últimos días, la gran prensa colombiana ha sindicado a la guerrilla de las FARC varios atentados de cochebomba en la ciudad de Neiva, controlada por una alcaldesa Uribista. Pero al mismo tiempo despierta la sospecha que los atentados pueden ser “falsos positivos”, montajes de la inteligencia militar para desviar la atención a la “narco-para-política” de los Uribistas en el congreso. Analizamos dos lados del periodismo colombiano.
CARACOL RADIO, 3 DE MARZO:
Un concejal y un dirigente sindical de Santander, dentro los capturados por presuntos vínculos con las FARC, dice Caracol Radio y cita el general Álvaro Enrique Miranda comandante de la Policía de Santander que sostiene que “con la captura de 27 personas sindicadas de pertenecer al vigésimo frente de las FARC en Bucaramanga y Sabana de Torres, se está debilitando a uno de los frente mas beligerantes que el grupo armado ilegal tiene en el nororiente colombiano”.
¿Será que Caracol Radio y el periodista que escribía esas líneas han dormido durante los años del mandato de Uribe? No han llegado las noticias a la redacción acerca de las detenciones masivas que ha resultado que los “terroristas” han sido absueltos después de largos meses o años por que han sido simplemente gente civil y en común.
Un ciego era “experto en explosivo” para la guerrilla
El jueves pasado se estrenó un nuevo documental excelente del periodista HOLLMAN MORRIS en el programa “CONTRAVÍA”, ahora en Telesur. Toca el tema de las recompensas y las detenciones masivas. Toma un ejemplo que ilustra la barbaridad de un estado policiaco y en donde hasta la abuela es sindicada por el hijo de ser “guerrillera de la FARC”. El periodista, con semejante valentía y con la voz muy seria menciona el caso de las detenciones en el municipio de Quinchia en el departamento de Risaralda.
“El pasado 28 de septiembre, la Unidad de Derechos Humanos de la Fiscalía General de la Nación, en conjunto con mil efectivos de la Policía Nacional, realizaron un operativo en el Municipio de Quinchía, en el que allanaron un significativo número de viviendas de pobladores de la región y capturaron a 90 personas entre ellas dos menores de edad, dos hombres que superan los 73 años y un invidente”, reportaba el Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos de Risaralda, el 1 de octubre de 2003.
JOSÉ DE LOS SANTOS SUÁREZ, 73 años, fue acusado por ser “experto en explosivo para la guerrilla”. Pero resulta, que el anciano es CIEGO! Y en la entrevista con Hollman Morris, este se ríe por la acusación. Pero nada chistoso ya que estuvieron encarcelados dos años. Pero a pesar de ese prolongado tiempo, TODOS salieron libres porque fueron inocentes. Ahora exigen al estado colombiano, y por supuesto lo merecen, la indemnización de 40 mil millones de pesos.
Uribe habría sido despedido
Lo que pasa es que Uribe y algunos fiscales deberían pagar cárcel por abusar y usar su posición en la guerra sucia contra todo lo que huele oposición para él. Los contribuyentes colombianos han tenido que pagar doble por la falta de capacidad profesional de aquellos señores: Primero pagan a los sapos llamados “informantes y cooperantes” y después el estado le toca a pagar altísimas multas a las victimas de un estado, no solamente militarizada hasta la esquina, sino lleno de gente con paranoia que ve “guerrilleros” en cualquier hueco. En cualquier empresa unas fallas equivalentes las de Uribe y de los fiscales hubieran traído como consecuencia el despedido inmediatamente.
Pero Caracol Radio actúan como idotas útiles para el juego de Uribe.
Los atentados en Neiva
El Tiempo, La W, Caracol Radio y casi todos los medios colombianos han atribuido categóricamente los dos atentados en la ciudad de Neiva, el viernes y el sábado, como obras de las FARC.
¿Y que pasa si no es así?
¿Que pasa con el prestigio de la gran prensa colombiana y sus redactores si los atentados son unos nuevos “falsos positivos”, organizados por sectores de las fuerzas militares y de la inteligencia militar que quieren poner una nueva cortina de humo para desviar a los escándalos de los narco-para-políticos, el suporte político congresista de Uribe?
Sucede el mismo día en que da orden de captura de Álvaro Araujo Noguera, viejo amigo de Uribe, ex senador, ministro de cultura y unos de los ganaderos más poderosos en Colombia, sin embargo papa de la ex ministra de relaciones exteriores, Maria Consuelo Araujo, hermana del detenido Álvaro Araujo Castro. Mejor dicho, otra familia ahogado en escándalos con los paramilitares e incondicionales aliados a Uribe.
¿Por qué bombas en Neiva?
Por que ahí esta otra aliada de la ala Uribista, la alcaldesa Cielo González Villa, una belleza de 38 años.
Dice la emisora “La W”, dirigido por Julio Cristo, entre varios, que “La W estableció con fuentes oficiales que dos vehículos Toyota blancos, tipo organismo de seguridad, fueron utilizados por las Farc para preparar el atentado que ayer estremeció a esa ciudad, y con el que pretendían asesinar a la alcaldesa Cielo González Villa”.
“Las camionetas ingresaron a la capital del Huila hacia la 1 y 30 de la madrugada y dieron varias vueltas por el centro de la ciudad, a fin de verificar las condiciones en que sería ejecutado el ataque terrorista. El Mazda 626 blanco con más de 20 kilos de explosivo llegó a Neiva a la misma hora y fue estacionado a las 4 y 50 frente a la emisora HJWK.”
Interrogantes incómodos
Dos cosas:
Primero, que los dos vehículos circulaban como fuera un carnaval en una ciudad más militarizada, por que el departamento es históricamente un departamento bajo influencia guerrillera. Pero circular como Pedro por su casa a esas horas en la ciudad, cuando nadie esta en la calle más que los agentes de la seguridad, policías uniformados y ejercito en sus retenes, suena, sinceramente, bastante extraño.
Segundo: La W y Julio Cristo ya han tomado la decisión de sindicar a la guerrilla de las FARC como los culpables. Otra falla periodística.
No son para nada ingenuos, mis colegas en La W, saben perfectamente que le puede costar “gordo” más adelante ser sindicado como un “inventor de las cosas”, de haber caído en la trampa de las filtraciones del Departamento E-5 del ejercito, la sección donde se encuentran uno de los más capaces periodistas colombianos pero con las tareas de producir “cortinas” en la guerra psicológica de las fuerzas armadas colombianas.
El atentado ¿un nuevo “falso positivo”?
En al misma película de Hollman Morris menciona el periodista en como los “falsos positivos”, es decir, los atentados atribuidos a la guerrilla de las FARC en realidad fueron atentados ejecutados por dos oficiales de la inteligencia militar. El presidente Uribe no duró ni una hora para sentenciar a la guerrilla como responsable por los hechos.
Lo mismo pasó en Neiva.
“Por allá están, cobardemente, don Manuel Marulanda y el otro señor Briceño y el otro señor Reyes, escondidos en la selva, mandando terroristas a hacer daño. Algún día caerán”, afirmó el presidente Uribe, citado por Caracol.
¿Y porque la prensa no lo cuestiona?
Y la prensa sigue Uribe en la cola, citándolo sin cuestionar y menos hacerle una pregunta tan lógica para cualquier periodista en el mundo; ¿“Y como sabe Usted, cuales son sus pruebas para decir así categóricamente que son las FARC que ha cometido el atentado”?
Pero no lo hacen, nunca. En mis seis años como corresponsal en Colombia jamás escuché algún periodista, ni en el Palacio presidencial o en alguna otra circunstancia, que el periodista colombiano de esos medios grandes preguntaba a Uribe ¿como puede ser tan categórico en sus conclusiones?
Periodistas como Julio Cristo de La W hablan mucho sobre ética pero en casos como el conflicto armado, parece que se convierten en otras personas, como tuvieran una doble personalidad.
El pretexto político para los atentados
En Estados Unidos fueron utilizados los atentados “positivos” o reales, el 11 de septiembre 2001 para lanzar guerras y ataques en todo el mundo. En Neiva algunos pusieron bombas cuyos efectos políticos, teóricamente, pueden ser tomados como pretextos para desviar la atención de los hechos reales en el país; un régimen y presidente sacudido en sus fundamentos, una élite política y económica arrinconado porque ya comienza a desbaratar su verdadero carácter como Padrino de los escuadrones de la muerte en Colombia, llamados paramilitares.
Y ahí en el medio del sándwich, están los colegas colombianos que se prostituyen al servicio de un poder podrido que crea zozobra en la población con sus “falsos positivos” y detenciones masivas a la población civil.
Les recomendamos a los consejos de redacciones y sobre todo a los jefes de Caracol, La W. El tiempo e otros a estudiar, analizar y discutir el excelente documental de Hollman Morris sobre las detenciones masivas y los falsos atentados realizados por los mismos militares que después, eso si, cobraron la famosa “recompensa de los lunes”.
